El termino manga puede no ser muy conocido por la mayoría de
la población, si consideramos a niños
pequeños y adultos mayores, en los países latinos. De hecho no es una palabra
de la lengua española, sino, la forma en que denominan a las historietas en Japón.
De una manera un poco más formal manga es todo comic de origen japonés, aunque
son muchos lo que llaman de esta forma a toda historieta con el mismo estilo de
dibujo.
Dibujo de Jazmín Lindao |
Actualmente se lo considera un fenómeno mediático, comercial y
cultural a nivel mundial. Por ejemplo si realizamos una búsqueda con la palabra
manga en google obtendremos cerca de cuatrocientos ochenta y seis millones de
resultados en varios idiomas. Si reducimos el rango de la búsqueda a solo imágenes
aparecerán cerca de ciento veintiséis millones de resultados. Y si orientamos
nuestra búsqueda a libros aparecerán aproximadamente dos millones cien mil
resultados.
Opuesto a lo que muchos piensan el manga no es de reciente
aparición. Los adultos quedaran convencidos de esta afirmación si recuerdan
dibujos animados como “Mazinger Z”, que
por cierto cumplió cuarenta años el
pasado tres de noviembre de dos mil doce. Si se retrocede
un poco más en el tiempo aparecerá el nombre de “Astroboy”,
perteneciente a la década de los sesenta
y muy popular todavía. Estas dos series animadas fueron basadas cada una
en su propio manga.
Astroboy (creado por Osamu tezuka) introdujo varias
características especiales, tanto en dibujo como en el guión, que perduran en
la producción de los autores contemporáneos. El creador del manga moderno, como
también se conoce a Tezuka, imprimió tanta humanidad en sus personajes, en sus
historias que estas atraparon a toda una generación dentro y fuera del
continente Asiático. Los ojos
desproporcionadamente grandes fue otra característica que “El Dios del manga” plasmó
en sus diseños para darles mayor expresividad; Este rasgo es distintivo del
estilo anime- manga en general.
Actualmente, los títulos más populares son: Naruto, Bleach y
One Piece. Los otakus, como se denominan los seguidores de este arte, los llaman
el trío Shōnen (dirigido a un público adolescente del género masculino). Estos mangas son actualmente publicados en la
revista semanal Shūkan Shōnen Jump,
la más popular en Japón con una circulación de aproximadamente cinco millones
de ejemplares por semana, y también la más reconocida en el mundo.
La industria relacionada al manga ha crecido exponencialmente
en los últimos tiempos llegando a generar millones de dólares en venta de
productos y servicios. Los títulos más populares se convierten en animes
(dibujos animados) y los que alcanzan un éxito mayor llegan a ser grandes
franquicias con películas animadas y de live action, Cd’s, muñecos, ropa,
accesorios… Sería interminable la tarea de nombrar todas la áreas en que se aprovecha
la marca para generar dinero. Un ejemplo común en las calles de la ciudad son
los Cd’s piratas que venden en cualquier esquina. Se pueden conseguir por este
medio todos los capítulos, Ova’s y películas de los animes más conocidos
(Pokemón, Dragon Ball, Saint Seiya, etc…).
Un dato de gran importancia es que también hay un amplio
mercado de productos dirigido a las personas que quieren convertirse en
mangakas (autores de manga). La no existencia de algunos artículos en el país
no es un obstáculo, importan, construyen; lo primordial es tenerlo. Libros,
revistas, suministros de arte, todo lo que sirva para crear un manga propio es
un ítem por comprar.
Foto tomada en el stand de artistas en acción durante la convención nacional del comic Guayaquil 2011 |
Algunos padres se quejan por la cantidad de dinero y tiempo
que sus hijos gastan en todo lo relacionado a “esos dibujitos chinos”, como los
llaman ellos. Se preocupan por las malas influencias de “esos muñecos de pelos
parados” y esos Pika-pikas amarillos que tiran rayos, pero, algunos abuelos
también se preocupaban muchos años atrás de cómo sus hijos eran influenciados
negativamente por esa música disco y esas tortugas que se creían ninjas y la
rata que hablaba. Es innegable que todo lo que ven, leen y escuchan afecta a
los niños y adolescentes positiva y negativamente. Lo discutible es que se
considere totalmente negativos a los mangas.
Son públicos los casos en que los imitadores han realizado
actos criminales parecidos a ciertas acciones leídas en el número semanal de la
Shōnen Jump. Pero, también son conocidos los casos de criminales que culpan a
la música que estaban escuchando o una película en particular. La cuestión es
que no se puede generalizar en ningún caso. Son numerosas las personas que
encontraron una frase épica, un motivo para seguir o una lección de vida
mientras leían su titulo preferido.
Es importante respetar siempre la opinión y gustos de los
demás y es incorrecto discriminar a alguien solo por tener un estilo de vida
diferente. El ser humano siempre tiende a tachar de malo lo desconocido, a
pensar que no es normal. Sería interesante buscar información sobre lo que se
deja a un lado por encasillarlo de friki, tal vez termine por gustate lo que antes criticabas.
Publicado originalmente en la revista "Comunicador X". Esta revista se realizó con la colaboración de Carlos Jaramillo y Alex Peñaherrera.
Redactado por Jefferson Mero.